Por primera vez en la historia del Bogotá Fashion Week se realizó una pasarela con 10 marcas de San Victorino. La Cámara de Comercio de Bogotá, junto con Pilar Castaño, Ana María Londoño y César Rincón presentaron la pasarela P U E N T E "El Madrugón", con una colección que celebró el denim en todas sus formas, su versatilidad y la capacidad para adaptarse a diferentes estilos y culturas. Su objetivo fue ampliar el acceso a la moda colombiana y visibilizar el talento que existe fuera de los circuitos tradicionales, ayudando a cerrar la brecha entre la moda popular y la moda ready to wear en el país.

El mercado de San Victorino es un motor económico esencial para Colombia, el cual genera miles de empleos. Según la Cámara de Comercio de Bogotá, al cierre de 2023, se reportaron 6.248 empresas activas de la industria de la moda ubicadas en el sector. Por ello, la presencia de San Victorino en el BFW representó una oportunidad única para promover el desarrollo económico, visibilizar la riqueza creativa y el talento de las marcas de denim que emergen de este sector, a la vez que se promovía la moda colombiana a nivel internacional.

"El proyecto '[P U E N T E]' y la pasarela 'El Madrugón' son una fuente de inspiración para toda la industria de la moda. Este esfuerzo muestra cómo el denim puede ser transformado y reinventado de innumerables maneras, destacando su versatilidad. Además, el BFW es una plataforma maravillosa para resaltar el talento excepcional de los diseñadores de San Victorino y promocionar nuestra vibrante industria del denim a nivel nacional e internacional. Esperamos que esta iniciativa ayude al reconocimiento de este sector popular como un productor de prendas de alta costura y calidad”, dijo Pilar Castaño, gestora del proyecto.

La industria denim en Colombia juega un papel fundamental en la economía colombiana. Para el 2024, las exportaciones de jeans sumaron 44,7 millones de dólares, un 5% de las exportaciones totales de la industria, según Procolombia. Los principales destinos de dichas exportaciones fueron Estados Unidos, que representó el 31% de las exportaciones, seguido por Ecuador (27%) y Guatemala (11%). A nivel departamental, Bogotá y Antioquía concentraron más del 75% de las exportaciones de jeans del país.

Con la iniciativa '[P U E N T E]', la Cámara de Comercio abrió un espacio para unir mundos, y en esta versión, la pasarela “El Madrugón” fue el piloto. Pilar Castaño, Ana María Londoño y César Rincón fueron los consultores de esta pasarela, quienes con su experiencia en la industria de la moda llevaron a San Victorino al Bogotá Fashion Week.

Tras un proceso de selección y curaduría, se seleccionaron 10 marcas para representar a San Victorino en “El Madrugón”. Fueron escogidas por los consultores en base a su creatividad, calidad, identidad de marca y potencial de exportación. Se caracterizan por tener más de 10 años en el mercado, ser empresas familiares que generan más de 2 mil empleos directos e indirectos en la producción y comercialización de sus prendas. Adicionalmente, cuentan con una capacidad de producción que puede alcanzar las 150 mil unidades al mes entre las 10 empresas participantes.

Marcas participantes: NK, Divina Collection, Plur Store, Wanaawaa, Ismo, Zoe Company, Seven7, Cannabis SAS, Kottrisk y Lisantiny.

Estas empresas apuestan a la sostenibilidad mediante varias acciones, como ofrecer trabajo decente, la reutilización de retazos en sus prendas y accesorios, apuntando a varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. Entre ellos, Industria, Innovación e Infraestructura (9), Igualdad de Género (5), Trabajo Decente y Crecimiento Económico (8), Reducción de Desigualdades (10) y Producción y Consumo Responsable (12), entre otros.

Carmen Cecilia Caballero, Presidenta de Procolombia, afirmó que "El Bogotá Fashion Week es un evento clave para mostrar el potencial de Colombia en el ámbito de la moda. Este sector, en crecimiento exponencial a nivel internacional, impulsa el desarrollo regional y posiciona a Colombia como líder en la industria. ProColombia apoya esta iniciativa invitando a compradores internacionales para que conozcan la sofisticada oferta del denim en el país, generando así oportunidades de mercado para los empresarios, especialmente los de San Victorino."

Las marcas recibieron asesorías en diseño, patronaje, confección y comunicación. Estas fueron personalizadas y se basaron en las necesidades específicas de cada marca, de forma presencial enfocadas 100% en el proceso del desfile. La mentoría del comité de consultores les dio a las marcas las herramientas necesarias para competir en el mercado internacional. La mentoría incluyó asesoría en aspectos como el desarrollo de producto, la estrategia de marketing y fortalecimiento de imagen frente a compradores internacionales.

Esta pasarela representó un reto para cada una de las marcas, para salir de su zona de confort, haciendo diseños elevados, manteniendo su capacidad de producción, en aras de aumentar y fortalecer las exportaciones. Pero también representó una oportunidad para visibilizar el talento que existe fuera de los circuitos tradicionales.

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