Con el paso de los años, Yonatan Bursztyn, fundador de Totto –junto a su equipo y colaboradores–, ha construido una compañía que genera valor agregado en cada proceso al reconocer la importancia de la producción consciente, gracias a la alta calidad y durabilidad de sus productos, como punto focal de su estrategia de sostenibilidad.

Con esta premisa, la marca ha liderado el top of mind de los consumidores en la categoría de moda alrededor del mundo, y con el paso de los años se ha destacado por mantener su esencia y responsabilidad en cuanto a sostenibilidad, con un portafolio y una estrategia acordes a las tendencias y necesidades del mercado.

La economía circular es parte focal de su estrategia de sostenibilidad [margen de contribución unitario o por proyecto, MG1], que se traduce en su principal promesa de valor y se materializa en tres frentes de trabajo: el primero, que inicia en 2005 con el Taller de Reparaciones, una propuesta de ecodiseño que consiste en alargar la vida útil de los morrales; los colaboradores se encargan de reparar los productos de clientes interesados, sin costo en la mano de obra.

El segundo, en 2017, cuando Totto lanza una línea escolar con lonas o telas desarrolladas a partir de fibras textiles RPET, desde botellas plásticas de un solo uso, recicladas y reutilizadas para crear productos útiles, resistentes y duraderos. Esta estrategia promovía el cuidado del planeta y la economía circular. La campaña obtuvo un crecimiento del 20 % en ecodiseño.

En 2019, el taller de reparaciones pasa al siguiente nivel con el programa Segundas Oportunidades, con el que sus clientes donan productos para ser seleccionados, reparados y donados a comunidades vulnerables.

A lo largo de su camino, la marca ha enfrentado desafíos y retos, debido a las particularidades y madurez del mercado colombiano frente a otros países del mundo, en relación con temas ambientales y de sostenibilidad. Sin embargo, esta situación le abrió la puerta para seguir detonando conversaciones y pedagogía, por medio de la publicidad sobre sus iniciativas, que se difunden a través de los diferentes puntos de contacto con sus consumidores.

Totto, una marca que muchos colombianos llevan en su corazón y que sabe cómo se mueve el mundo, seguirá comprometida para impactar positivamente el medio ambiente y a sus clientes que – al ser parte de sus campañas– entienden su propósito y la importancia de impulsar la economía circular con cada una de sus acciones, iniciativas y estrategias.

Artículo publicado en la edición #491 de los meses de abril y mayo de 2024.

Este artículo es una colaboración paga con Totto.

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