Un producto que ha trascendido fronteras y generaciones, convirtiéndose en un ícono indiscutible de la marca.
En el Día Internacional de las Papas Fritas, McDonald’s, una de las cadenas de comida más famosas del mundo, comparte detalles sobre sus papas fritas distintivas. Introducidas en el menú en 1955, estas papas se han convertido en un ícono de la marca y siguen siendo una de las opciones más queridas globalmente.
Las papas de McDonald’s se cultivan en regiones con suelos y climas ideales para asegurar su calidad. Se seleccionan cuidadosamente, eligiendo variedades alargadas que permiten producir los bastones característicos que tanto gustan a los consumidores, aunque el tamaño puede variar debido a la naturaleza de cada papa.
Las papas se cortan a gran velocidad, pasando por cuchillas cuadriculadas que aseguran la forma homogénea y consistente que caracteriza a este producto. En la planta de finalización, pasan por procedimientos tradicionales de pelado, lavado y secado antes de ser cortadas, congeladas y enviadas a los restaurantes.
Por otro lado, el control riguroso de la temperatura y un tiempo de cocción que no excede los 3 minutos asegura que las papas mantengan una textura crocante por fuera y tierna por dentro. Además la preparación se realiza en aceite vegetal sin aditivos ni antioxidantes, manteniendo la pureza y sabor característico.
¿Qué sucede con el aceite después de freír las papas? Un aspecto a resaltar es el compromiso de McDonald’s con la sostenibilidad; la cadena implementa un proceso de reciclaje para convertir el aceite usado en biodiesel y jabón, subrayando su responsabilidad ambiental.
Con esto, McDonald 's se ha consolidado como el mayor vendedor de papas fritas en diversos países, un producto que ha trascendido fronteras y generaciones; y es que no existe una única manera de consumirlas, ya sea como acompañamiento de una hamburguesa, con nuggets, solas, con salsas e incluso con helado, las opciones para combinarlas son diversas.
Durante décadas, la compañía ha perfeccionado sus recetas, evolucionado sus ingredientes y manteniendo los más altos estándares de calidad y seguridad alimentaria. Estos procesos se pueden observar a través del programa “Puertas Abiertas”, que se trata de un recorrido en el que cualquier persona puede acceder a las cocinas para conocer cada paso en la preparación de las papas y demás productos.
