
En 2025, la innovación, la inteligencia artificial y la conexión con las audiencias serán clave para las marcas que quieren evolucionar. El secreto está en saber cómo y de la mano de quién hacerlo.
Las redes sociales dejaron de ser simples canales de información unidireccional. Las audiencias ya no quieren solo escuchar a las marcas; quieren interactuar con ellas. Eitan Shoval, managing partner de Asylum Marketing, analiza esta transformación y su impacto en las estrategias.
“La clave es entender que las audiencias no son pasivas. Ellas construyen comunidad, crean contenido y participan activamente”, explica Shoval.
En 2025, la IA será un aliado estratégico, no solo una herramienta. “Redefinirá la personalización y creará experiencias hipersegmentadas en tiempo real”, dice Shoval. Esto transformará cómo las marcas entien- den y responden a sus consumidores, y optimizará cada punto de contacto.
Contar historias que conecten
El video se seguirá consolidando como el formato más efectivo para generar engagement y un storytelling poderoso. “Desde un reel corto hasta un video largo, ofrece distintas formas de conectar emocionalmente con la audiencia”, asegura Shoval. La clave está en ofrecer contenido auténtico y de calidad que genere una respuesta emocional.
Datos propios: el nuevo activo estratégico
En este mundo sin cookies, las marcas deben fortalecer sus datos propios. “La privacidad y el acceso a datos directos son clave para conectar con los usuarios”, dice Shoval. Es esencial aprovechar el first-party data (compras, visitas, registros) y el zero-party data (preferencias compartidas voluntariamente). Esto mejora la personalización, la confianza y la fidelización.
Redes sociales: de la difusión a la conversación
Las redes sociales ya no son solo canales de información; las audiencias buscan interacción y diálogo. No basta con publicar; las marcas deben fomentar participación y responder en tiempo real. “El éxito no es solo alcance, sino crear comunidad”, dice Shoval.
Desde transmisiones en vivo hasta contenido interactivo, el engagement bidireccional es clave.
En e-commerce, el reto no es solo vender, sino ofrecer una expe- riencia completa. “Las marcas deben construir relaciones duraderas y conectar lo físico con lo digital para una experiencia omnicanal”, concluye.