Según el tercer estudio Mujeres y hombres: brechas de género en Colombia, realizado por ONU Mujeres y el DANE, las brechas entre hombres y mujeres se mantuvieron en el país siendo la violencia contra las mujeres una realidad crítica en el país.
La brecha de la desigualdad entre mujeres y hombres en Colombia, aunque persiste, muestra una leve mejoría: algunos aspectos de la vida de las colombianas han mejorado cuando se analizan las estadísticas de género entre los datos publicados en la segunda y esta tercera edición. Así lo indica ‘Mujeres y hombres: brechas de género en Colombia’ en su tercera edición bianual. Este estudio que es realizado por ONU Mujeres junto al Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) y que cuenta con el apoyo de la Embajada de Suecia en Colombia y el Ministerio de la Igualdad y la Equidad a través de su Viceministerio de las Mujeres, tuvo su lanzamiento en el marco del V Foro Mundial de Datos de las Naciones Unidas desarrollado en Medellín.
En esta tercera edición, aunque algunos indicadores presentan mejoras, las brechas entre mujeres y hombres en Colombia siguen siendo significativas. En 2023, el 30,4 % de las mujeres mayores de 15 años no contaba con ingresos propios, en contraste con el 11,7 % de los hombres. Este dato muestra una reducción respecto a la edición de 2020, donde el 39,1 % de las mujeres y el 16,7 % de los hombres carecían de ingresos personales.
Frente a la tasa de desempleo, se observa que entre 2021 y 2023 la brecha pasó de 6,7 puntos porcentuales a 4,6, situándose por debajo de los niveles previos a la pandemia. Si bien las cifras comparativas muestran leves avances, las mujeres siguen enfrentando mayores obstáculos al evidenciar que la pobreza continúa teniendo un “rostro femenino”: en 2023, por cada 100 hombres en situación de pobreza, había 121 mujeres.
Bajo otra dimensión de análisis, cabe enfatizar que la violencia contra las mujeres según las valoraciones médico legales sigue siendo una crítica problemática en Colombia. En 2023, en promedio, cada día tres mujeres fueron asesinadas, 101 resultaron lesionadas por su pareja y 46 niñas fueron víctimas de agresión sexual.
Sobre las cifras reveladas, la representante país de ONU Mujeres en Colombia, Bibiana Aido Almagro, afirmó: “los problemas estructurales requieren soluciones estructurales: promover más y mejores indicadores que reflejen la situación social, económica y política de las mujeres. Para esto se requiere fortalecer la implementación sostenida del enfoque diferencial e interseccional en los datos y la toma de decisiones para mejorar la vida de la gente. Aunque vemos una mejoría muy pequeña en algunos indicadores, las brechas entre mujeres y hombres tienen que cerrarse a un paso más acelerado. Los derechos humanos de la mitad de la humanidad dependen de ello”.
La continuidad de tres ediciones en la publicación para Colombia se realiza en respuesta a la necesidad de identificar y de visibilizar los avances, así como las limitaciones y las oportunidades para el cierre de brechas entre hombres y mujeres, incluyendo el empoderamiento de las mujeres, su incorporación a los mercados laborales y su participación en el desarrollo económico sostenible e inclusivo.
En su intervención, Piedad Urdinola, directora del DANE, destacó la importancia de contar con datos desagregados y análisis con enfoque de género para fundamentar políticas públicas efectivas que impulsen la igualdad en Colombia. En clave de cifras sobre el trabajo de cuidados no remunerado, los datos indican que las mujeres dedican en promedio 7 horas y 44 minutos a estas tareas, frente a las 3 horas y seis minutos de los hombres. Las mujeres dedican más del doble del tiempo que los hombres a las labores domésticas y de cuidado no remunerado, lo que sin duda constituye una limitante para su plena participación en el desarrollo en su triple dimensión: económica, social y ambiental.
La crisis climática también tiene una afectación diferencial sobre las mujeres y su seguridad alimentaria, esto como consecuencia de la disminución en el rendimiento de los cultivos: en Colombia, la proporción de hogares con jefatura femenina (29,2%) en inseguridad alimentaria moderada o grave es mayor que los hogares con jefatura masculina (23,6%). Aunque esas diferencias también se presentan en las zonas urbanas, los niveles de inseguridad alimentaria son más altos en los hogares rurales con jefatura femenina (35,3%). Además, en los hogares con jefatura femenina indígena, la inseguridad alimentaria afecta al 43,7% de los hogares y, en aquellos hogares cuya jefa es negra/afrocolombiana/raizal/palenquera, el 41,3% de los hogares presentan esta condición.
Durante el lanzamiento de la publicación, Ingrid Rydell, jefa de la unidad de datos, estadísticas y análisis de la Agencia sueca internacional de cooperación al desarrollo (SIDA) indicó que “este tipo de publicaciones son claves para la información basada en evidencia que permitan influir en la toma de decisiones en la política pública”.
Adicionalmente, la ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación, Yesenia Olaya, comentó que “los datos aún son preocupantes: del ciento por ciento de las investigadoras del país, solo el 30% son mujeres. El Gobierno Nacional quiere avanzar en la democratización del conocimiento a todo nivel para que estas cifras se reviertan”.
Esta edición se publica a casi cinco años de cumplir el plazo de la Agenda 2030 y la conmemoración de tres décadas de la Plataforma de Acción de Beijing. Continuar con la recopilación de información estadística y su análisis con perspectiva de género es fundamental para la toma de decisiones en materia de políticas públicas para la igualdad entre mujeres y hombres.
‘Mujeres y hombres: brechas de género en Colombia’ no solo busca fortalecer la producción de estadísticas de género, sino también incentivar su uso en el ciclo de políticas públicas, sirviendo como mecanismo de monitoreo y rendición de cuentas para que la agudeza de la desigualdad que sigue costándole la vida a millones de mujeres en el país cese.
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