Oreo, una galleta con 110 años de historia que la han posicionado globalmente como la favorita de los consumidores. Aquí algunos detalles de su historia.
La galleta Oreo se ha convertido en un ícono global, debido a su presencia de consumo en más de 100 países. Su éxito no solo se ha mantenido por su característico sabor, sino también por sus campañas, estas han representado su forma de consumo como un imperdible desde la infancia.
Sus inicios se dan en 1912 cuando fue producida por The National Biscuit Company (Nabisco) en Nueva York. Su primera envoltura fue dorada y su nombre se registró como Oreo Biscuit. Décadas después el producto llegó a Centroamérica y Latinoamérica.
Posteriormente, iniciaron sus cambios de imagen; en 1952, William A. Turnier, empleado de Nabisco, fue el encargado de rediseñar el aspecto de la galleta para dejarla como actualmente se conoce: tréboles de cuatro hojas y el logo de Nabisco sobre el nombre Oreo.
En 1974 salió la versión del producto que más se ha mantenido en el mercado, las Oreo Double Stuf (Doble Crema) no varía su receta, sino la cantidad de crema en su interior. Los ingredientes que la componen la destacan como una galleta veggie friendly.
El fenómeno Oreo
Oreo lleva 110 años en el mercado global, durante este tiempo se ha mantenido como la preferida de los consumidores, es la galleta #1 vendida en el mundo tras haber alcanzado ingresos netos anuales de 3,1 mil millones en 2019.
Su icónica forma de comerla es seguida por aproximadamente el 50% de quienes la consumen: destapar, raspar con la lengua la crema y mojar en leche. Y, su escencia playful, conecta a las personas, tal y como aseguran sus creadores "porque la alegría y diversión hacen parte del ADN de Oreo".
