En junio de 2024, el gasto de los hogares colombianos mostró una reacción inesperada ante el reciente freno en la inflación, según el último informe de RADDAR. El análisis revela un comportamiento económico que ha sorprendido a expertos y ciudadanos, señalando una disminución en el gasto real que no se veía desde finales del año 2023.

El gasto total de los hogares en junio alcanzó los $84,9 billones de pesos, un aumento del 5,14% en términos corrientes respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, en términos reales, el gasto mostró una contracción del 1,9% anual, marcando una desaceleración considerable respecto al crecimiento del 7,14% registrado en mayo de 2024. Este descenso representa el tercer mes consecutivo de ajuste negativo y el más profundo desde octubre de 2023.

Durante el primer semestre de 2024, el gasto de los hogares acumuló $514,3 billones de pesos, lo que representa un crecimiento del 7,23% en términos nominales. Sin embargo, con una inflación promedio del 7,49%, el volumen real de bienes y servicios adquiridos se redujo en un 0,24%. Históricamente, el segundo semestre del año tiende a mostrar un mejor comportamiento en el gasto de los hogares, pero el contexto inflacionario y económico de 2024 ha llevado a un desempeño menos optimista.

El descenso en el gasto real está vinculado a varios factores económicos y sociales:

• Aunque la inflación general se desacelera, los precios de alimentos y servicios siguen subiendo, afectando el poder adquisitivo y los presupuestos de los hogares.
• A pesar de un aumento del 4,57% en el salario mínimo real, el salario promedio por ocupado ha disminuido un 2,6%, limitando la capacidad de gasto de los hogares.
• Pérdida en la creación de empleo, especialmente en el sector informal, que representa más del 50% de los ocupados en el país.
• El repunte en la inflación de bienes no durables, especialmente en alimentos, ha afectado el poder adquisitivo de los hogares.
• La inflación en servicios permanece estancada, lo que también contribuye a la restricción del gasto.
• Caída en el gasto tras las celebraciones del Día de la Madre y el Día del Padre.
• Los impuestos saludables, que gravan productos no saludables, también están influyendo en los precios y, por ende, en el gasto de los hogares.
• La colocación de créditos subió un 6,3% anual, pero el crecimiento es menor que el año pasado, y la desaceleración en créditos de consumo está limitando el gasto.

Impacto regional

A nivel regional, se observa que las ciudades del sur de Colombia han mostrado una mejor dinámica en el gasto, debido a una mayor recepción de remesas y una menor inflación en alimentos. En contraste, las ciudades del norte del país enfrentan mayores desafíos debido al impacto de los altos precios de la energía, por las secuelas del fenómeno de El Niño.

El ajuste del gasto de los hogares refleja cómo las familias están respondiendo rápidamente a los cambios en el entorno económico. A medida que la inflación se estabiliza, los hogares están siendo más cautelosos con sus gastos. La situación económica en el segundo semestre del año será crucial para determinar si esta tendencia negativa puede revertirse.

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