viernes, noviembre 22, 2024
Comunicación

4 pasos para exprimir la naranja

Como el petróleo, las ideas y talento de los jóvenes, son materias primas que nos presentan magníficas oportunidades de desarrollo, pero son igualmente inútiles si nos los explotamos y empleamos de manera adecuada.

La diferencia de fondo es que mientras el petróleo necesita ser explorado, extraído, refinado y consumido, las mentes de nuestros jóvenes necesitan ser liberadas, expuestas, desafiadas y recicladas para generar las infinitas mentefacturas que definen la economía del siglo XXI.

Liberación Naranja

Felipe Buitrago

El talento es un recurso maravilloso que debemos explorar. Hay muchos tipos de talento, pero por lo general solo prestamos atención a aquellos que nos presentan una utilidad inmediata. Es así como la mayor parte de los jóvenes pasan por el sistema educativo sintiendo que sus habilidades no tienen valor.

El primer paso es entender que debemos dejar de buscar homogenizar a nuestros jóvenes, y darles la oportunidad de mostrarnos la asombrosa diversidad que esconden. Esto significa hacer de nuestra sociedad un espacio tolerante, abierto y libre de censura, en la que todos sientan que pueden vivir sus sueños sin temor a ser discriminados.

Exposición Naranja

Para vivir, las ideas necesitan reproducirse. Ninguna gran obra surge del vacío, todas son el resultado directo e indirecto de múltiples encuentros amorosos entre lo tradicional y lo moderno, lo convencional y lo revolucionario, lo mejor y lo peor.

El segundo paso es facilitar que las ideas de los jóvenes se “contaminen” con todo tipo de ideas. Entre más, mejor. Esto significa educación de calidad, espacios culturales (físicos y virtuales) para entrar en contacto con el mundo, y las herramientas para practicar y desarrollar el talento; desde instrumentos musicales hasta conexión a Internet.

Desafío Naranja

Salvo algunos genios, la mayoría de nosotros tenemos que trabajar todos los días con humildad para mejorar y, tras mucho esfuerzo, alcanzar la excelencia en aquello que amamos hacer. Pero digámonos la verdad: cuando fuimos jóvenes alguna vez creímos que lo sabíamos todo. Los jóvenes de hoy no son diferentes. Todos necesitamos modelos a seguir y modelos a derrotar.

El tercer paso es asegurarnos que el camino de nuestros jóvenes no sea fácil. Esto no quiere decir hacérselos imposible. Todo lo contrario, significa que para entregarles las herramientas físicas y virtuales que necesitan, debemos acompañarlos y exigirles su máximo esfuerzo, de lo contrario no las apropiarán ni emplearán a profundidad, para enfrentar los retos importantes de su desarrollo profesional.

Reciclaje

A diferencia del petróleo, que una vez consumido se agota, las ideas son un recurso renovable. Entre más explotamos una idea, más influyente se vuelve, y mejores son las ideas que se derivan de combinarla con otras ideas.

El paso final es activar una ecología de emprendimiento alrededor de nuestros jóvenes. Sin duda algunos serán mejores que otros para pintar, componer, cantar o escribir. Otros lo serán para editar, producir, conectar o promocionar. Y, finalmente, otros serán excelentes ingenieros, abogados, administradores e inversionistas. Todos caben y son son necesarios en la Era del Conocimiento.

Por: Felipe Buitrago, consejero para asuntos económicos y estratégicos de la Presidencia de la República de Colombia.

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