Aunque algunas personas creen que los eventos se mantienen vigentes solo con los ingresos en taquilla la verdad es que esto solo cubre un porcentaje. El resto proviene de patrocinios de marcas que comprenden el valor de estar presentes en un festival donde cada punto de contacto con su audiencia es una oportunidad de monetización.

Cada marca tiene su propio ritmo y escoge cómo envolver a su audiencia. BetPlay llevó a cabo una activación inspirada en Las Vegas dentro del Festival Estéreo Picnic 2025. Su espacio incluyó:

Matrimonios al estilo Las Vegas

Los asistentes tuvieron la oportunidad de vivir la emoción de casarse en una boda simbólica, con un Elvis Presley oficiando la ceremonia. Todo en un ambiente lleno de diversión y la esencia de Las Vegas, recordando la icónica frase: "Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas."

Cocteles exclusivos

El cocktail BetPlay, diseñado especialmente para el evento, se convirtió en el favorito de muchos. Cada día se sirvieron aproximadamente 200 cócteles, ofreciendo a los asistentes un toque refrescante mientras disfrutaban del festival.

Entretenimiento

El stand de BetPlay trajo el espíritu de Las Vegas al festival con un ambiente lleno de luces, música y juegos como Uno y Ruleta. Además, se incluyeron estaciones de carga para celulares, permitiendo a los asistentes seguir conectados y compartir cada momento de la experiencia.

Sobre la activación de marca BetPlay afirma que

Cuando la gente viaja a Las Vegas, busca entretenimiento, diversión, nuevas experiencias y el espectáculo de sus icónicas luces. Queríamos traer toda esa esencia y energía a nuestra activación en el festival

Las marcas que participan en estos espacios logran conectar con su público objetivo en un entorno donde la pasión y la emoción están al máximo. No se trata de estar presentes, sino de impactar con experiencias que dejen una huella en los consumidores. Cuando una marca transforma el engagement en lealtad, los resultados comerciales se vuelven sostenibles en el tiempo.

La clave está en crear un evento en el que todos quieran estar. Cuando el engagement es masivo, los eventos dejan de ser solo encuentros y se convierten en fenómenos culturales. Y cuando eso sucede, todo lo demás fluye naturalmente: mejores experiencias, más audiencia, mayor engagement y, en consecuencia, más ingresos.

Pero no solo gana el evento; las marcas también se benefician con mayor visibilidad, conexión y ventas. Por eso, no se trata únicamente de vender entradas, sino de diseñar una experiencia que tanto personas como marcas deseen formar parte de ella.

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