Con el objetivo de resaltar la importancia del arte colombiano, Faber-Castell, junto a diferentes artistas, rindió homenaje a lo más característico de la historia colombiana por medio del arte, la pintura, la caricatura y la plastilina.
Homenaje
En el homenaje realizado por los artistas de Faber-Castell, está la obra “Grito que construye una patria”, realizada por Mauricio Meijín, quien destaca la batalla de Boyacá, el florero de Llorente y otros representantes como Policarpa salavarrieta. Entre las técnicas usadas en esta creación se encuentra el lápiz de color para ilustrar, junto con los policromos.
Leonardo Marmolejo rinde un homenaje al país con su obra de Simón Bolívar, en la que mezcla el retrato de la figura humana junto a la ciencia ficción. Su creación se ha caracterizado por ser el tipo de caricatura de fisonomía que exalta las cualidades de quien retrata, generando así imágenes que son generalmente usadas como fotos de perfil, avatares e iconos.
El artista Julio César Lemos también rindió un tributo con su obra del libertador Bolívar con una caricatura fisonómica. Con la técnica de lápiz de color para ilustrar.
Este homenaje contó, también, con una representación a la fauna y cultura colombiana, gracias a la obra de Oscar Daniel Pérez, por medio de acuarelas, pinturas y tintas, este artista hizo alusión a la naturaleza del país; adoptando de esta forma la realidad, pasión y fantasía, en una sola obra de arte. Él, también ha sido nombrado embajador del caribe colombiano.
Sin embargo no solo la técnica del dibujo y la pintura son los protagonistas, Andrés Mejía Laverde, presenta en su obra el uso de diferentes técnicas a base de plastilina, en la que demuestra el orgullo colombiano y el patriotismo.
