Este 2 de abril inicia la tercera edición del Bogotá Fashion Week 2019, la plataforma de circulación, contacto para los negocios y fortalecimiento empresarial, que convertirá a la ciudad en la ‘Capital de negocios de la moda de talla internacional’.

El evento, que promueve la Cámara de Comercio de Bogotá, se lleva a cabo en el Ágora Centro de Convenciones. En esta edición contará con la participación de 48 diseñadores nacionales de los sectores de prendas de vestir; cuero, calzado, marroquinería, joyería y bisutería, quienes tendrán la oportunidad de robustecer sus negocios y encontrar nuevos mercados.

Al respecto, P&M habló con Martha Ligia Gracia, directora del Bogotá Fashion Week, quien nos contó cuáles son ls novedades del evento para este año y su importancia para el desarrollo de la industria de la moda en la capital.

Este es el tercer año del Bogotá Fashion Week, ¿en qué consiste, cómo ha evolucionado y qué novedades habrá en esta edición?

En esta ocasión tenemos un grupo mucho mas nutrido de diseñadores. Esta versión contará con 48 de las categorías prendas de vestir, calzado y marroquinería y joyería y bisutería. Además, trae de nuevo un componente muy agresivo en términos de negocio. Hemos hecho una investigación y análisis del mercado para poder entender cómo ser mucho más asertivos al generar ese match entre la oferta y lo que demandan las tiendas a nivel internacional.

Adicionalmente, hemos recibido un apoyo importante de nuestro aliados de la Alcaldía de Bogotá y ProColombia, que nos permite traer por primera vez tiendas o formatos especializados en la comercialización y distribución de diseño. Este tipo de tiendas son muy importantes para el mercado consolidado. Es decir que, esta versión tiene diseñadores consolidados que podrán llegar sin ningún problema a estas plataformas digitales y presenciales porque tienen una capacidad de producción que responde a los volúmenes que demandan este tipo de tiendas. Para los más emergentes, también tenemos boutiques que comercializan marcas y productos pero que no necesariamente demandan cantidades industriales para las cuales el diseñador aún no está listo.

¿Cuál es el panorama actual y cómo contribuye este evento al desarrollo del comercio en Bogotá?

Bogotá no se caracteriza por ser muy fuerte en tiendas multimarca, como si funciona por ejemplo en países de Europa. El canal digital es muy importante porque es lo que está demandando el nuevo consumidor. Tener tiendas que permitan llegar a todo el mundo abre más y mejores oportunidades. Sin embargo, se tiene que estar listo para ser capaz de atender esa demanda.

Es importante que, a través de las marcas que comercializan vía canales digitales, los diseñadores puedan aprovechar esos espacios para comercializar. Bogotá se caracteriza por tener unas muestras de diseño muy importantes. No en vano es donde se consume el 40% de la moda del país.Lo que tenemos que hacer es generar nuevos espacios para que las marcas puedan llegar a oportunidades comerciales.

¿Qué expectativas en cuanto a asistencia y desarrollo tienen para este año?

Estamos esperando unos 16.000 asistentes, considerando que en la versión 2018 tuvimos 14.300. En esta ocasión tenemos diez diseñadores más que el año anterior. Por eso, estamos esperando que muchos más visitantes puedan acceder a la muestra de diseño. Nos interesa mucho dar a conocer todo el desarrollo de producción que se ha venido trabajando de la mano de la curaduría internacional que viene pagando la Cámara de Comercio y del fortalecimiento que vienen teniendo estas empresas para que esos show rooms puedan degustar, entender y comprender todo el desarrollo de colección y el potencial que tiene Bogotá.

¿Cómo se mueve actualmente la industria de la moda y cómo se ha acoplado o integrado la tecnología?

La industria de la moda se mueve mucho a partir del consumidor. Hoy el consumidor entiende, es consciente y es agresivo porque se informa, sabe qué está ocurriendo en el mundo y puede comparar precios aprovechando la tecnología. En esta nueva era que estamos viviendo los canales digitales son fundamentales. La gente no quiere perder tiempo en un centro comercial. El nuevo consumidor no quiere desgastarse en trancones ni en filas. La tecnología juega un papel protagónico para llegar al consumidor y hacer negocios.

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